jueves, 19 de enero de 2012

Las Hormonas

Las hormonas son las causantes de muchas de nuestras reacciones ante las cosas y son capaces provocar cambios y movimientos en nuestro organismo. Continuamente se están descubriendo nuevas capacidades y propiedades de éstas. Además realizan una función importantísima de nuestro organismo, son mensajeras del las células.

Ingredientes: una punta de adrenalina, un toque de cortisol, una pizca de dopamina y un par de granos de oxitocina. Mezclar bien y calentar a fuego lento. Y ya tenemos lista una pócima del amor que ni la mejor hechicera podría superar. Efectos garantizados: corazón desbocado, debilidad de rodillas, mariposas en el estómago...
Como si de un brebaje se tratase, así operan las hormonas, las sustancias que `gobiernan´ nuestras reacciones en lo más profundo del ser humano, incluido el núcleo celular, allí donde actúa el material genético. Influyen tanto en la memoria como en el carácter, hacen que nos pongamos pálidos, que nos acaloremos, nos cohibamos, nos enfademos o nos dejemos embargar por la pasión.
Una de estas poderosas sustancias es la oxitocina; otra, latestosterona; otra, el estrógeno... La ciencia lleva décadas trabajando para descifrar su funcionamiento. Las hormonas, de cuyo total conocemos 150, son los mensajeros que permiten que los cien mil millones de células de un ser humano adulto se comuniquen entre sí. Si el sistema nervioso es la red telefónica de la que el cerebro se vale para mover el dedo gordo del pie, las hormonas son algo así como una radio interna. Su servicio de noticias llega al último rincón del cuerpo, y es el sistema circulatorio quien lleva sus mensajes a todas partes.
No pasa un mes sin que se descubran nuevos datos sobre las pasmosas capacidades de estos mensajeros químicos, aunque el principio fundamental sigue siendo el mismo: la sinfonía de hormonas, dirigida principalmente por el hipotálamo y la hipófisis –situados ambos en el interior del cerebro–, garantiza en cada segundo de nuestras vidas el adecuado desarrollo de las funciones corporales básicas, del metabolismo y de la propia percepción.
La receta exacta es individual, al igual que el rostro, la voz o las huellas dactilares: un poco más o un poco menos de esta sustancia o de aquella; todo depende de los genes, la edad, la situación y la época del año.
La luz diurna, por ejemplo, regula la liberación de la hormona del sueño, la melatonina, que rige el ritmo día-noche. La excitación durante una competición deportiva hace que borbotee la hormona del estrés. Por su parte, el cortisol y la adrenalina logran que las experiencias más impactantes se afiancen en nuestra memoria. Que casi todo el mundo sea capaz de decir dónde estaba el 11 de septiembre de 2001 se debe a que la onda de miedo registrada por nuestro sismógrafo interno alcanzó aquel día valores máximos.
«Quédate con esto», es el mensaje del cortisol y la adrenalina, los mensajeros presentes en todos los momentos clave de nuestra vida, «el mundo ha cambiado, adáptate, eso podría salvarte la vida», nos dicen. Da igual que se trate de explosiones vistas en la televisión o del primer encuentro real con un oso salvaje: las hormonas son la tinta con la que el entorno escribe en nuestro cuerpo y nuestra mente.
También se encuentra su rastro en el código genético, que pasa a ser interpretado de forma diferente tras unas experiencias determinantes. La joven ciencia de la epigenética se encarga de este interesantísimo aspecto. Psicólogos, psiquiatras y neurocientíficos han ido emigrando hacia este campo de la investigación. Ahora, casi no pasa una semana sin que alguno de los clichés más repetidos sobre las emociones acabe en el cubo de la basura de la historia de la ciencia.

¿Cómo matan las Boas Constrictor?

Un estudio realizado por unos científicos ha desvelado el secreto de cómo las boas constrictor matan a sus victimas.Tienen un sistema mediante el cual reciben las onda vitales de su presa y asi es como saben cuando pueden dejar de estrangularlas. También se ha demostrado que según la variedad aprietan más o menos para acabar con su presa.
Cuando una boa constrictor atrapa a su presa, la rodea con su cuerpo y oprime con todas sus fuerzas hasta causarle la muerte. Este abrazo letal es la obra de un experimentado ejecutor, capaz de medir los latidos del corazón de su víctima como un lutier las cuerdas de un violín, según han descubierto un grupo de científicos norteamericanos. En una operación de altísima precisión, el depredador percibe cada señal vital de su pobre mártir y sabe exactamente cuánto tiempo debe permanecer apretando hasta convertirlo en su próxima cena.


«La constricción es una actividad energéticamente costosa y potencialmente peligrosa», explican los investigadores del Dickinson College en la Universidad Estatal de Pensilvania. «Por ese motivo, resulta muy beneficioso para las serpientes saber con exactitud cuándo la presa se encuentra incapacitada y ya no es capaz de revolverse o escapar». Las boas tienen la habilidad innata de variar el tiempo y el esfuerzo de sus apretones según sus necesidades, pero la investigación, publicada en Biology Letters, indica que incluso pueden aprender a hacerlo mejor.


En la naturaleza, una boa tiende a constreñir una rata durante unos 20 minutos antes de zampársela. En su experimento, los investigadores introdujeron falsos corazones latentes en ratas muertas que aún estaban calientes y, una vez que las boas atrapaban a sus víctimas, provocaban cambios en los corazones de mentira de forma remota: hacían que dejara de latir después de diez minutos o lo mantenían en marcha todo el tiempo.


Las silvestres aprietan más fuerte
Cuando el corazón seguía funcionando, la boa mantenía la presión -controlada por sensores- incluso después de los 20 minutos habituales, ajustando los músculos de su cuerpo periódicamente antes de darse por vencida. Cuando la presa no emitía latidos, la serpiente reducía sus esfuerzos a la mitad y dejaba de apretar después de diez minutos. Si, en cambio, el corazón latía diez minutos exactos, la boa constreñía durante un poco más de tiempo.


«Nuestro estudio es el primero en demostrar que las serpientes utilizan el latido del corazón de su presa como una señal para modular el esfuerzo de constricción y para decidir cuándo soltarla», explican los investigadores. Incluso las serpientes que nunca habían comido presas vivas reaccionaron de igual forma en los experimentos de los latidos, pero las silvestres apretaron más fuerte y durante más tiempo. «La capacidad de responder a un latido del corazón es algo innato, mientras que la magnitud de la respuesta está guiada por la experiencia», dicen.


Los investigadores creen que las serpientes pueden haber desarrollado esta habilidad para sentir el corazón de sus presas como una manera de lidiar con los lagartos, que pueden sobrevivir durante horas después de haber sido aplastados. Además, las serpientes pudieron desarrollar una sensibilidad extrema en su piel como una forma de percibir el medioambiente cuando perdieron sus patas.
www.abc.es/20120119/ciencia/abci-mata-constrictor-201201191005.html

La NASA evita el estreno del primer corto de ciencia ficción rodado en la ISS

El creador de videojuegos Richard garriot, hijo del astronauta owen garriot viajo como turista a l espacio con la iss, en su estancia allí grabó una película en la que aparecían miemros de la nasa, esta no quiso que saliera a l luz y solo le pemitieron publicar un video sobre el en el espacio.Solo algunos millonarios han logrado viajar al espacio ya que es un viaje valorado en más de 20.000 millones de dólares.
  • Fue rodada por Richard Garriot durante su estancia en Estación Espacial (ISS)
  • El creador de videojuegos es uno de los siete turistas que viajó a la ISS
  • Los astronautas de la NASA aparecen en este corto de ciencia ficción
  • Sólo podrá estrenar el documental 'Man on a Mission' sobre su experiencia
El espacio es un tema recurrente en las películas de ciencia ficción aunque hasta ahora, todas han tenido que recrear los escenarios en la Tierra. El creador de videojuegos Richard Garriot, uno de los siete turistas que ha viajado a la Estación Espacial Internacional (ISS), aprovechó su estancia en la plataforma orbital para rodar un corto de ciencia ficción en un ambiente de ingravidez real. También fueron realistas las interpretaciones, ya que los astronautas de la NASA Mike Fincke y Greg Chamitoff y el cosmonauta Yuri Lonchakov son los protagonistas. La cinta, sin embargo, no se estrenará debido a la oposición de la NASA, que ha logrado evitar su difusión.
El corto censurado por la NASA se titula 'Apogee of Fear' y dura ocho minutos. Según ha explicado Garriot, la película narra la historia de un alienígena escondido en la plataforma orbital. Los tripulantes de la ISS descubren su presencia al detectar que el consumo de oxígeno en las instalaciones se dispara de forma inexplicable.
La aparición de sus astronautas en el corto es una de las razones que esgrime la NASA para impedir su estreno, según explicó Garriot en declaraciones a Space.com. El empresario se mostró decepcionado por la decisión de la agencia estadounidense, aunque no cree que a la NASA no le guste la película. Simplemente, sostiene, no coincide con el mensaje que la agencia quiere transmitir: "De momento, la NASA ha decidido que no se estrene públicamente debido a que el film ha sido rodado en instalaciones de su propiedad y aparecen sus astronautas", afirmó el empresario.

Es hijo del astronauta Owen Garriot

Para lograr ir a la ISS en 2008 y emular a su padre, el astronauta Owen Garriot, el empresario desembolsó 30 millones de dólares (unos 23 millones de euros). Su progenitor viajó al espacio en dos ocasiones. En 1973 pasó 60 días en el laboratorio Skylab, logrando el récord de permanencia en el espacio hasta entonces. Diez años más tarde, se subió al transbordador 'Columbia' para una misión de diez días en Spacelab-1.
Debido a la oposición de la NASA, su hijo Richard tendrá que conformarse el estreno de otra cinta grabada durante su viaje turístico y en la que él es el protagonista. El documental 'Man on a Mission', que se estrenó el 13 de enero y ha sido dirigido por Mike Woolf, recoge las vivencias de Garriot durante los 12 días que pasó junto a los astronautas de la ISS.
La cinta resultará interesante para los amantes del espacio pero lo cierto es que tanto la NASA como la ESA han difundido en el pasado numerosos documentales sobre la vida de los astronautas en la ISS. El impacto está muy lejos del que seguramente habría generado el estreno de la primera película rodada en el espacio.
Por ahora no han servido para convencer a la NASA ni la insistencia de Garriot ni los intentos de instituciones como el prestigioso Instituto Smithsonian, que consideran de gran interés la película.

Turistas en el espacio

Hasta ahora sólo siete multimillonarios (seis hombres y una mujer) han viajado como turistas a la Estación Espacial Internacional tras someterse a un intenso entrenamiento y desembolsar una fuerte suma. Las expediciones se realizaron entre 2001 y 2009 y fueron gestionadas por la compañía Space Adventures. Todos ellos volaron en naves rusas 'Soyuz', pues hasta ahora EEUU no ha organizado ninguno de los viajes. El último cliente pagó 35 millones de dólares (27 millones de euros) por su billete.
El ingeniero de software húngaro Charles Simonyl, uno de los primeros programadores que Bill Gates contrató para Microsoft, ha sio el único en repetir y planea volver este año.
Richard Garriot viajó a la ISS el 12 de octubre de 2008 a bordo de una 'Soyuz TMA-13'. Según la compañía Space Adventures, su principal objetivo a la hora de realizar este viaje era animar a las compañías privadas a participar en el sector espacial.
Desde 2009 no ha vuelto ningún turista a la ISS, una plataforma concebida como centro de investigación a unos 400 kilómetros de la Tierra. Tras la jubilación de la flota de transbordadores de la NASA el pasado verano, las naves rusas 'Soyuz' son las únicas que actualmente se usan para trasladar a los astronautas a la ISS, de forma que sus limitadas plazas están más demandadas que nunca.
Sin embargo, la compañía Space Adventures propone a las personas que en el futuro vayan a contratar un viaje a la ISS (el precio actual es de 38 millones de euros) extender su estancia otros cinco días para disfrutar de un paseo espacial de 90 minutos por otros 11 millones de euros. Hasta ahora ningún turista ha realizado una caminata fuera de la nave, una experiencia que podría inspirar un nuevo guión de ficción. Con permiso de la NASA, eso sí.

Nuevos planetas orbitan alrededor de dos soles

El telescopio espacial Kepler de la NASA ha detectado dos nuevos planetas que orbitan sistemas binarios formados por dos estrellas. Se trata de Kepler-34b y Kepler-35b, dos planetas gigantes gaseosos, pero seguramente existen muchos más, según plantean sus descubridores en el último número de la revista Nature.


Un equipo internacional de científicos, liderado desde la Universidad Estatal de San Diego (EEUU), publica esta semana en Nature el descubrimiento de dos nuevos planetas “circumbinarios”, término que hace referencia a que orbitan un sistema binario formado por dos estrellas. La mayoría de estrellas similares al Sol de la galaxia se presentan en este tipo de sistemas.
A partir de una muestra de 750 sistemas monitorizados por la misión Kepler de la NASA, el equipo formado por el investigador William Welsh y sus colegas ha encontrado a los planetas circumbinarios Kepler-34b y Kepler-35b, dos gigantes gaseosos.
Kepler-34b orbita dos estrellas similares al Sol cada 289 días. Su masa representa un 22% respecto a la de Júpiter (el gigante gaseoso más grande de nuestro Sistema Solar) y su radio el 76%. Por su parte, Kepler-35 b es un planeta con un 13% de la masa y el 73% del radio de Júpiter. Orbita alrededor de un par de estrellas más pequeñas cada 131 días.
Millones de planetas circumbinarios
Los hallazgos se suma a otros descubrimientos anteriores de este tipo de planetas, como Kepler-16b el año pasado, y pueden ayudar a estimar la fracción de estrellas binarias que poseen planetas circumbinarios a su alrededor.
Además, mediante la extrapolación de la tasa observada de este tipo de planetas, los autores estiman que alrededor de un 1% de las estrellas binarias cercanas tienen planetas gigantes con órbitas próximas alineadas. Este cálculo supone una población galáctica de por lo menos varios millones de planetas circumbinarios.
La existencia de planetas que orbitan un par de estrellas normales se estableció con el descubrimiento del sistema binario de Kepler-16, pero su abundancia no había estado clara hasta ahora.

El mamut lanudo convivió con ciervos, corzos y jabalíes en la Península Ibérica

Ni el mamut lanudo ni el resto de fauna de climas fríos presente en Europa durante el Pleistoceno se asentaron de forma permanente en la Península Ibérica, donde tuvieron que vivir en condiciones ecológicas diferentes a las del resto del continente y compartir hábitat con animales de climas templados.

Durante las glaciaciones del Pleistoceno, toda Europa central y gran parte de Asia estaban dominados por animales propios de clima glacial, un conjunto de especies conocido como “fauna del mamut”. Como explica el profesor de la Universidad de Oviedo Diego Álvarez Lao, “en los episodios de frío más intenso, las poblaciones de estas especies se vieron obligadas a migrar hacia el sur y, de este modo, podemos constatar la presencia del mamut lanudo, el rinoceronte lanudo y el reno en la Península Ibérica. Ahora sabemos que estos mamíferos adaptados al clima frío tuvieron que convivir en la Península con ciervos, corzos y jabalíes, especies propias de climas templados que eran comunes aquí en esta época”.

Esta es una de las conclusiones del último trabajo de Álvarez Lao y la profesora de la Universidad Complutense Nuria García que hoy publica la revista Quaternary Science Reviews.

Los mismos autores han realizado estudios similares centrados en Europa y en la Península Ibérica para otras especies de fauna de clima glacial, una línea de trabajo que continúan en la actualidad. Tras haber obtenido en el caso del rinoceronte lanudo resultados muy similares en todos los aspectos a los que ahora se publican acerca del mamut, y teniendo en cuenta las observaciones que los autores del artículo están registrando en el caso del reno, los doctores Diego Álvarez Lao y Nuria García ponen el acento en que la mera presencia de estas especies no significa que se hayan asentado de forma permanente, “y esto es lo que sucedió no sólo con el mamut, sino con el resto de la fauna glacial presente en la Península Ibérica”, señalan.

Cuestión de tamaño

Una de las evidencias que llevaron a los autores del artículo a esta conclusión es el resultado de analizar el tamaño corporal. “Para muchas especies se ha constatado que las poblaciones de latitudes meridionales tienen una talla menor que sus poblaciones nórdicas, como respuesta adaptativa a un clima diferente, de acuerdo con la regla biológica de Bergmann”, explica Álvarez Lao. Se trata de un patrón, añade, que se puede observar actualmente en especies como el ciervo, el oso o el halcón, en las que las poblaciones de Escandinavia poseen mayor talla que las ibéricas.

“Del mismo modo, se podría esperar que los mamuts ibéricos hubiesen experimentado una disminución de talla con respecto a las poblaciones del centro y norte de Europa si hubiesen dispuesto de suficiente tiempo para experimentar este cambio evolutivo”, afirma el investigador. Pero los resultados obtenidos en este estudio indican que los mamuts lanudos que habitaron la Península eran del mismo tamaño que los del resto de Europa, por lo que muy posiblemente sus poblaciones no hayan estado asentadas durante el tiempo suficiente como para desarrollar una disminución de talla.

“En un trabajo previo ya habíamos comprobado que los mamuts del yacimiento de Padul, en Granada, no diferían en tamaño de las poblaciones del resto de Europa. Ahora podemos afirmar que sucede lo mismo en todas las localizaciones de la Península, lo que sugiere que los mamuts entraron en la Península durante episodios de tiempo limitado, quizá de forma esporádica coincidiendo con los momentos más fríos”.

Durante las glaciaciones, las especies propias de climas templados (como el ciervo o el jabalí) se refugiaron en las áreas más meridionales de Europa (penínsulas Ibérica, Itálica y Balcánica), huyendo del frío. Pero en los episodios de de frío y aridez extremos, incluso la “fauna del mamut” se desplazó también hacia el sur, aunque éste no fuese su hábitat más adecuado, ya que los mantos de hielo cubrían extensas áreas del centro y norte de Europa, impidiéndoles encontrar pastos. “No se desplazaron por el frío en sí, al que estaban bien adaptados, sino por falta de espacios que les proporcionasen alimento”, explica Álvarez Lao.

Pero el desplazamiento hacia el Sur encontró su límite en la Península Ibérica: “Por cuestiones geográficas, los ‘visitantes’ del Norte no pudieron desplazar a los habitantes de la Península, que no podían cruzar el Estrecho para dirigirse más al Sur, y tampoco los sustituyeron, sino que se mezclaron con ellos”, destaca el profesor de la Universidad de Oviedo.